Rosa Ruiz, embajadora de Santiago Ruiz

Si algo define a la familia Ruiz es su pasión por el vino. Una herencia recibida de una saga familiar en la que el bisabuelo de Rosa, Ángel, ya elaboraba vino a finales del siglo XIX. Una tradición que profesionalizó su padre, cuando en los años 80, tras su jubilación, funda una pequeña bodega junto a la casa familiar de San Miguel de Tabagón, en O Rosal.

La infancia de Rosa transcurrió, casi sin darse cuenta, entre cepas. Durante los meses de verano se desplazaba desde su Vigo natal a la casa familiar de O Rosal, una finca que heredó su padre de su abuelo y donde, casi como un juego, Rosa y sus hermanas cuidaban y vendimiaban las uvas para elaborar vino para su consumo.

Años más tarde, en los 80, su padre, Santiago Ruiz, decidió modernizar la bodega y cambió los tradicionales barriles de madera por depósitos de acero inoxidable. Un proceso revolucionario y pionero en aquella época, y que marcó un antes y un después en la historia de los vinos gallegos.

Con estos antecedentes, era casi imposible que Rosa no se dedicase al mundo del vino. Una pasión que comenzó paulatinamente: primero, los fines de semana que ayudaba a su padre en los papeleos de la bodega, hasta finalmente convertirse poco a poco en su mano derecha; de él aprendió las técnicas y secretos de la elaboración del vino de O Rosal. Un aprendizaje que ha dejado como herencia un profundo amor y respeto por el viñedo.

Hoy, Rosa Ruiz es la embajadora de esta casa centenaria. Recorrer con ella la bodega museo, situada en San Miguel de Tabagón, es recordar la figura de su padre y su contribución a la Denominación de Origen Rías Baixas. Una entregada anfitriona con la que conversar durante el recorrido de esta bodega tranquila y apacible, en la que descubrir cómo se hacía el vino tradicionalmente en la zona y el legado que dejó el propio Santiago Ruiz. Una vida plagada de anécdotas que Rosa menciona orgullosa durante la visita, al igual que muestra las dedicatorias plasmadas a lo largo de los años en su libro de firmas.

Rosa Ruiz, un 100 % albariño procedente de cepas viejas
Sus más de 30 años dedicados por completo a la bodega merecían un homenaje. Es así como nace Rosa Ruiz, un vino que representa la continuidad de la bodega, 100 % albariño procedente de las viejas cepas entre las que transcurrió la niñez de Rosa. Un blanco lleno de significados que completa la historia de esta saga familiar dedicada desde hace generaciones a la cultura del vino.